Se dice generalmente que el patriotismo real y bueno consiste en desear para nuestro pueblo o Estado, todos los beneficios positivos que no restrinjan el bienestar de las otras naciones.
Hablando con un inglés durante la guerra en el Transvaal, le manifestaba que la verdadera causa de la guerra no era la avaricia, como generalmente se dice, sino el patriotismo, como lo prueba la actitud de la sociedad inglesa entera. El inglés no quedó conforme conmigo, y me dijo que, aún suponiendo que eso fuera cierto, resultaría de los hechos que inspira actualmente a los ingleses un mal patriotismo; pero que el buen patriotismo, tal como lo sentía él, consistía en el bueno comportamiento de todos los ingleses, sus compatriotas.
–¿Entonces desea ud. que únicamente los ingleses se comporten bien? –pregunté yo.
–Deseo que así lo hagan todos los hombres –contestó; demostrando claramente con esta contestación lo que es la característica de los verdaderos beneficios –sean morales, científicos y hasta materiales y prácticos- es decir: que se transmitan a todos los hombres; y por consiguiente, el desear tales beneficios para alguno, no solamente no es patriotismo, sino que es el reverso de lo patriótico.
León Tolstoi - Patriotismo y Gobierno
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