Por Acratosaurio Rex
La promulgación por parte del Gobierno de la Nación Española del Estado de alarma, debido a la crisis de ansiedad que han padecido los controladores aéreos (1), merece como mínimo el siguiente comentario:
Llama la atención, que el Consejo de Ministros no haya promulgado el Estado de Excepción por la ansiedad que está padeciendo un 40% de españoles que viven en hogares en los que ningún miembro del grupo doméstico labora... ¿Cómo sobreviven? ¿De dónde sacan los lexatines? Son casi un millón novecientos mil desempleados viviendo juntitos sin tener ingresos... La cosa suena a confabulación de parados. El Gobierno debería investigar a esos sediciosos a los que ha quitado la limosna de 426 euros, porque de alguna parte sacan la comida. Decretazo ya, que impida la reunión de más de dos parados en el mismo hogar.
Volviendo a eso de los aeropuertos... El Gobierno, tras poner toda la carne en el asador, al mando aéreo de la OTAN, a varios tenientes coroneles que habían hecho el cursillo de inglés, a controladores militares capacitados para seguir el vuelo de una escuadrilla en simulador, y tras lanzar pavorosas amenazas a diestro y siniestro (el Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire ha perdido sus vacaciones), ha conseguido abrir el espacio aéreo. Aplausos del público por la instauración de la Dictadura militar, ya que el puente de la Constitución peligraba. ¿Qué no haría nuestro Gobierno, en el caso de que peligrase el mes de agosto, por error de las imprentas a la hora de hacer los calendarios?
Solo me queda ver la militarización de los prostíbulos, y la implantación del Estado de Sitio, para honra de sus señorías. Controladores aéreos: no nos dejéis solos, resistid, que alguien tiene que hacerlo. ¡Ostras! ¡Lo mismo sois el Nuevo Sujeto Revolucionario! ¡Que lo estudien los catedráticos!
Y luego dicen que el loco soy yo.¡De Alarma, de Excepción y de Sitio! ¡Abajo la Dictadura! ¡Abajo el Estado! Lo que es de uno es de todos, lo que es de todos es de nadie, lo que es de nadie es de uno
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(1) Para conocimiento del público mexicano, previo a los días festivos del Puente de la Constitución , el gobierno promulgó un decreto que modificaba brutalmente la jornada laboral de los controladores aéreos, obligándoles a ampliar las horas de trabajo establecidas por convenio, y que habían sido ya superadas en el mes de noviembre. Los controladores aéreos se dieron de baja masivamente, y la respuesta del gobierno fue militarizarlos. La prensa ha mostrado a los controladores como un gremio abusivo que cobra sueldos multimillonarios, pero el problema complejo es que el gobierno está privatizando los aeropuertos para sacar pasta, que han construido una cantidad de aeropuertos deficitarios con los que se han lucrado los corruptos de siempre, y que están militarizando una sociedad supuestamente democrática.
La promulgación por parte del Gobierno de la Nación Española del Estado de alarma, debido a la crisis de ansiedad que han padecido los controladores aéreos (1), merece como mínimo el siguiente comentario:
Llama la atención, que el Consejo de Ministros no haya promulgado el Estado de Excepción por la ansiedad que está padeciendo un 40% de españoles que viven en hogares en los que ningún miembro del grupo doméstico labora... ¿Cómo sobreviven? ¿De dónde sacan los lexatines? Son casi un millón novecientos mil desempleados viviendo juntitos sin tener ingresos... La cosa suena a confabulación de parados. El Gobierno debería investigar a esos sediciosos a los que ha quitado la limosna de 426 euros, porque de alguna parte sacan la comida. Decretazo ya, que impida la reunión de más de dos parados en el mismo hogar.
Volviendo a eso de los aeropuertos... El Gobierno, tras poner toda la carne en el asador, al mando aéreo de la OTAN, a varios tenientes coroneles que habían hecho el cursillo de inglés, a controladores militares capacitados para seguir el vuelo de una escuadrilla en simulador, y tras lanzar pavorosas amenazas a diestro y siniestro (el Jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire ha perdido sus vacaciones), ha conseguido abrir el espacio aéreo. Aplausos del público por la instauración de la Dictadura militar, ya que el puente de la Constitución peligraba. ¿Qué no haría nuestro Gobierno, en el caso de que peligrase el mes de agosto, por error de las imprentas a la hora de hacer los calendarios?
Solo me queda ver la militarización de los prostíbulos, y la implantación del Estado de Sitio, para honra de sus señorías. Controladores aéreos: no nos dejéis solos, resistid, que alguien tiene que hacerlo. ¡Ostras! ¡Lo mismo sois el Nuevo Sujeto Revolucionario! ¡Que lo estudien los catedráticos!
Y luego dicen que el loco soy yo.¡De Alarma, de Excepción y de Sitio! ¡Abajo la Dictadura! ¡Abajo el Estado! Lo que es de uno es de todos, lo que es de todos es de nadie, lo que es de nadie es de uno
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(1) Para conocimiento del público mexicano, previo a los días festivos del Puente de la Constitución , el gobierno promulgó un decreto que modificaba brutalmente la jornada laboral de los controladores aéreos, obligándoles a ampliar las horas de trabajo establecidas por convenio, y que habían sido ya superadas en el mes de noviembre. Los controladores aéreos se dieron de baja masivamente, y la respuesta del gobierno fue militarizarlos. La prensa ha mostrado a los controladores como un gremio abusivo que cobra sueldos multimillonarios, pero el problema complejo es que el gobierno está privatizando los aeropuertos para sacar pasta, que han construido una cantidad de aeropuertos deficitarios con los que se han lucrado los corruptos de siempre, y que están militarizando una sociedad supuestamente democrática.
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