A ocupar la tierra

¿Qué es aquella polvareda,
qué rumores trae el viento?
¿Qué es aquel color que surge
por el llano como un fuego?

Son los hombres y mujeres
verdes, blancos, rojos, negros
que iluminan la mañana
entonando un canto viejo
de los campos andaluces:
“Tierra y libertad queremos”.

Como una marea el grito
se va extendiendo muy lejos
y va llegando a las plazas,
a las ciudades y pueblos
donde ya prendió la rabia
y se despertó un anhelo:

“Quiero tierra y libertad
y pan y rosas queremos,
que el amor se desparrame
y que la Luna en el cielo
baile una rumba gitana
con el Sol y los luceros.”

Los dueños del gallinero
no quieren que un gallo rojo
vaya a robarles sus huevos:
ya va la Guardia Civil,
y si es preciso el ejército,
por si la prensa no basta
para difundir el miedo.

Pero no puede pararse
la razón común del pueblo:
“La propiedad es un robo,
pero aquí todos cabemos”.
Se llama Sánchez Gordillo,
y también se llama Diego,
y se llama Rosa y Juana,
y se llama jornaleros,
nadie se llama la gente,
pues no tiene nombre el viento
ni al polvo de los caminos
pueden llevárselo preso.

Fuente:Portal OACA