jueves, 11 de agosto de 2011

¿Quién conoce una riqueza que sea inocente?

EL SISTEMA

Lo único libre son los precios. En nuestras tierras, Adam Smith necesita a Mussolini.
Libertad de inversiones, libertad de precios, libertad de cambios: cuanto más libres andan los negocios, más presa está la gente. La prosperidad de pocos maldice a todos los demás. ¿Quién conoce una riqueza que sea inocente? En tiempos de crisis, ¿no se vuelven conservadores los liberales, y fascistas los conservadores? ¿Al servicio de quiénes cumplen su tarea los asesinos de personas y países?

Orlando Letelier escribió en The Nation que la economía no es neutral ni los técnicos tampoco. Dos semanas después, Letelier voló en pedazos en una calle de Washington.
Las teorías de Milton Friedman implican para él el Premio Nóbel; para los chilenos, implican a Pinochet. Un ministro de Economía declaraba en el Uruguay: "La desigualdad en la distribución de la renta es la que genera el ahorro." Al mismo tiempo, confesaba que
le horrorizaban las torturas. ¿Cómo salvar esa desigualdad si no es a golpes de picana eléctrica? La derecha ama las ideas generales. Al generalizar, absuelve.




Extracto del libro Días y noches de Amor y de Guerra, de Eduardo Galeano

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por participar, puedes decir lo que quieras, solo trata de aportar.