Este artículo no deja de ser gracioso y una buena muestra del cinísmo y descaro de la clase política y dirigente sindical que pulula en México. Quién lo diría, Gómez Urrutia, un conocido dirigente tranza y ladrón, haciendo una justa crítica y denuncia en contra de la reforma laboral. Más allá de que diga la verdad (en esta ocasión)...¿a quién creerá que engaña?
Koan
La reforma, un paso al vacío y a la crisis social: Gómez Urrutia
Los legisladores que avalan este
Gómez Urrutia subraya que “en todo esto hay responsables: el Congreso, Felipe Calderón mismo, el Consejo Coordinador Empresarial y sus abogados patronales, los sindicatos cómplices, charros y corporativos, los medios de comunicación reaccionarios que apoyan todo esto con campañas publicitarias.
Gómez Urrutia advierte que “el engaño y el cinismo son ya política de Estado. PRI y PAN han dicho que no se trata de cambios constitucionales, pero lo que están haciendo con la Ley Federal del Trabajo es reglamentar la forma en que tú puedas ejercer tus derechos constitucionales; el de huelga, por ejemplo, lo reglamentan de tal forma que prácticamente impiden ir a la huelga.
“En el exceso, pretenden que sea el empresario quien decida si le estallan la huelga o no. Entonces, reglamentan para impedir que se ejerzan los derechos constitucionales. Si esa es la decisión, deberíamos fijarles salario por hora y contratos a prueba a diputados, senadores, lobistas, empresarios, periodistas afines al régimen, y al Presidente”.
En los hechos, dice el líder minero, “se trata de una contrarreforma laboral. Si ahora, vigente la LFT, hacen lo que se les pega la gana mandando porros a tomar instalaciones y minas, amenazando a los trabajadores, imponiendo contratos de protección, sindicatos blancos, evadiendo obligaciones legales y tantas otras cosas, entonces, ¿qué no harán el día en que ya tengan la reforma laboral a su favor?”
Añade que el grado de explotación va a llegar a tal nivel que
este país será inhabitable. “¿Quieren reforma laboral? Pues que se haga
por consenso, con la participación de todos, que se tome el tiempo
suficiente para su análisis. Pero es impensable en los términos y en las
condiciones con las que pretenden imponerla.
Los promotores de la
“Y eso es responsabilidad del patrón. Está en la Constitución, en la LFT y en los contratos colectivos. La verdad es que tiene la cola tan sucia la clase empresarial en México, avalada por funcionarios serviles, que entonces dicen: ‘hay que hacer una reforma laboral’. Pues no: hay que hacer una reforma patronal; queremos saber cuánto pagan de impuestos, las utilidades generadas, porque al no reportarlas no sólo transan al fisco, sino también a los trabajadores”.
Se le da mucha importancia a la transparencia sindical, “pero nada dicen del mugrero en la clase empresarial, protegida y apapachada por el gobierno. Y ahora quieren darle más: una política y una ley laborales que favorecen un esclavismo disfrazado para explotar la mano de obra como en campos de concentración, como lo hacen en las empresas de Germán Larrea, Alonso Ancira y Alberto Bailleres.
“¿No se dan cuenta Calderón, el Congreso, el PRI, de lo que quieren aprobar? Que hagan una reforma patronal de fondo, que cambie la mentalidad de los patrones para que sean solidarios con sus trabajadores y también con México. ¿Y ‘líderes’ obreros como Joaquín Gamboa Pascoe, Víctor Flores y demás? Sólo se bajan los pantalones para mantener sus prebendas.
Fuente: La Jornada
Koan
La reforma, un paso al vacío y a la crisis social: Gómez Urrutia
La presunta
Considera que las consecuencias para México “son graves en extremo y
en pocos años vamos a estar en una delicada crisis social de desempleo y
en medio de una profunda crisis política. No se trata de ser
catastrofista, sino de reflexionar en lo que ya hemos visto: nos quieren
llevar a una situación peligrosa y a una ‘reforma’, cuando los demás
países ya vienen de regreso, precisamente por las graves crisis sociales
que han acumulado, producto de reformas similares”.reforma laboralque el Congreso pretende aprobar es
una bomba de tiempo que se le deja al próximo gobierno, a lo largo del cual estallaría con los nefastos resultados implícitos, advierte Napoleón Gómez Urrutia, líder del sindicato minero, en entrevista con La Jornada.
Los legisladores que avalan este
paso al vacío lo hacen por consigna; no analizan ni miden los efectos que van a provocar, no sólo para la clase trabajadora, sino para el país, añade. Lo que en realidad se requiere
es un reforma patronal de fondo.
Gómez Urrutia subraya que “en todo esto hay responsables: el Congreso, Felipe Calderón mismo, el Consejo Coordinador Empresarial y sus abogados patronales, los sindicatos cómplices, charros y corporativos, los medios de comunicación reaccionarios que apoyan todo esto con campañas publicitarias.
Es muy delicado lo que está pasando, y efectivamente dañará mucho más la imagen de México una dictadura disfrazada donde se reprimen los derechos de los trabajadores, la libertad de asociación, la autonomía sindical para favorecer intereses oscuros y particulares. ¿Por qué nos quieren llevar por ese camino? Es indignante.
Gómez Urrutia advierte que “el engaño y el cinismo son ya política de Estado. PRI y PAN han dicho que no se trata de cambios constitucionales, pero lo que están haciendo con la Ley Federal del Trabajo es reglamentar la forma en que tú puedas ejercer tus derechos constitucionales; el de huelga, por ejemplo, lo reglamentan de tal forma que prácticamente impiden ir a la huelga.
“En el exceso, pretenden que sea el empresario quien decida si le estallan la huelga o no. Entonces, reglamentan para impedir que se ejerzan los derechos constitucionales. Si esa es la decisión, deberíamos fijarles salario por hora y contratos a prueba a diputados, senadores, lobistas, empresarios, periodistas afines al régimen, y al Presidente”.
En los hechos, dice el líder minero, “se trata de una contrarreforma laboral. Si ahora, vigente la LFT, hacen lo que se les pega la gana mandando porros a tomar instalaciones y minas, amenazando a los trabajadores, imponiendo contratos de protección, sindicatos blancos, evadiendo obligaciones legales y tantas otras cosas, entonces, ¿qué no harán el día en que ya tengan la reforma laboral a su favor?”
El líder minero, Napoleón Gómez UrrutiaFoto María Luisa Severiano /Archivo
Es una grave irresponsabilidad que el Congreso no mida las consecuencias que esto va a generar para los trabajadores y para México. ¿En manos de quiénes estamos?
Los promotores de la
reformaenfatizan que ésta permitirá transparentar los recursos sindicales, porque hay muchos líderes corruptos. Ante esto, Gómez Urrutia revira: “Pues hay más empresarios corruptos y nadie los toca: no pagan impuestos, no transparentan su situación fiscal, nunca reportan utilidades, no invierten en seguridad, higiene y prevención, y por sus negligencias criminales mueren trabajadores.
“Y eso es responsabilidad del patrón. Está en la Constitución, en la LFT y en los contratos colectivos. La verdad es que tiene la cola tan sucia la clase empresarial en México, avalada por funcionarios serviles, que entonces dicen: ‘hay que hacer una reforma laboral’. Pues no: hay que hacer una reforma patronal; queremos saber cuánto pagan de impuestos, las utilidades generadas, porque al no reportarlas no sólo transan al fisco, sino también a los trabajadores”.
Se le da mucha importancia a la transparencia sindical, “pero nada dicen del mugrero en la clase empresarial, protegida y apapachada por el gobierno. Y ahora quieren darle más: una política y una ley laborales que favorecen un esclavismo disfrazado para explotar la mano de obra como en campos de concentración, como lo hacen en las empresas de Germán Larrea, Alonso Ancira y Alberto Bailleres.
“¿No se dan cuenta Calderón, el Congreso, el PRI, de lo que quieren aprobar? Que hagan una reforma patronal de fondo, que cambie la mentalidad de los patrones para que sean solidarios con sus trabajadores y también con México. ¿Y ‘líderes’ obreros como Joaquín Gamboa Pascoe, Víctor Flores y demás? Sólo se bajan los pantalones para mantener sus prebendas.
Entonces, tenemos un futuro inmediato muy delicado, lo que refleja el gran resentimiento que Calderón mostró a lo largo de su sexenio en contra de los trabajadores. Él y su equipo, y un ejemplo nítido es el totalmente perverso, entreguista y corrupto Javier Lozano.
Fuente: La Jornada
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar, puedes decir lo que quieras, solo trata de aportar.