“Los queremos de vuelta”, grito que inunda las calles de la ciudad de México

México, DF. 3 de diciembre. Dos días después de la represión del primero de diciembre en las afueras del Palacio Legislativo y en el centro de la Ciudad de México, miles de personas de distintas organizaciones, entre ellas del movimiento #Yo soy 132, se manifestaron por un llamado a la unidad del movimiento social y por la libertad de los presos políticos. La marcha inició su recorrido del Ángel de la Independencia con destino al Zócalo de la ciudad de México, y estuvo conformada en su mayoría por jóvenes, campesinos de San Salvador Atenco y madres de familia de los presos, que con consignas y pancartas exigieron la libertad de sus hijos y compañeros.

Más  de 106 personas y varios heridos de gravedad fue el saldo de los enfrentamientos que ocurrieron en las  los alrededores del Palacio legislativo de San Lázaro y en la inmediaciones del Zócalo de esta ciudad.  Hasta el momento continúan  67 personas detenidas, algunas ya fueron consignados al penal de Santa Martha y otras al reclusorio Norte, bajo la acusación de ataques a la paz pública, delito federal que se castiga de 5 a 30 años de prisión. A algunos se les quiere acusar también de daños y ataques a las vías de comunicación.

Lo anterior convocó la marcha que hoy ingresó al Zócalo por avenida 5 de Mayo, reguardada por una vaya de granaderos por ambas aceras, lo que provocó la indignación de los manifestantes, quienes les reclamaron directamente la represión del sábado pasado. “Peña Nieto no es mi presidente”, gritaron una y otra vez durante la marcha.

“Los queremos de vuelta”, fue el grito unánime de la multitud congregada frente a la pista de patinaje. Padres y madres de familia desesperados por liberar a sus hijos remarcaron el carácter pacífico de la manifestación. Durante el acto, una madre pidió el micrófono y convocó a  los estudiantes a que demuestren al gobierno que ellos no son los violentos.

Banderas de luto que se estrenaron en la manifestación del primero de diciembre, se expandieron hoy en el Zócalo capitalino. El verde y el rojo de la bandera nacional fueron sustituidos por el negro, dejando claro lo que significa el nuevo gobierno de Peña Nieto.

Javier Bautista, del movimiento #YoSoy132 académicos, recuerda que el sábado primero de diciembre “eran las seis de la mañana y nosotros aún no llegábamos a la Cámara de Diputados cuando nos enteramos que ya había enfrentamientos, pero nosotros, los del 132, no sabíamos ni quiénes eran”.

Las provocaciones durante la toma de posesión dejaron varios heridos de gravedad, entre ellos Francisco Kuykendall Leal, de 67 años, profesor de teatro e integrante de La Otra Campaña, herido en la cabeza por un proyectil de gas lanzado por policías federales. Francisco fue retirado del lugar inconsciente y con exposición de masa encefálica; mientras el joven Rubén Fuentes fue herido con arma de fuego en una pierna; y Uriel Sandoval, de la UACM, perdió el ojo a causa de una bala de goma, de las que supuestamente no se usaron.

Después de la represión, relata Bautista, “algunos nos fuimos a la agencia 50 del Ministerio Público y podíamos ver a algunos compañeros que iban bajando de las patrullas. Teníamos comunicación con ellos y nos dijeron que fueron golpeados y que muchos de ellos no pertenecían al movimiento #YosSoy132, pero fueron a protestar y otros ni siquiera estaban en la protesta, sino que iban pasando. Todas fueron detenciones ilegales”.

En La lista de personas detenidas ^[2], se  indica dónde fueron aprehendidas. Sin embargo, en varios de los testimonios se narra que Mariana Muñiz Nieto, estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, por ejemplo, fue detenida a las 12 del día en la calle Filomeno Mata, y está acusada de causar disturbios en avenida Juárez a la 13:30 horas. Mientras que Adrián Rafael Romero Escalante y Job Reyes Jiménez, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, fueron detenidos en el Monumento a la Revolución, y posteriormente trasladados a la avenida Juárez, para luego ser detenidos nuevamente allí.

“Nosotros habíamos detectado que grupos de infiltrados traían pantalones color caqui, camisa negra y un guante negro. Los vimos platicar con la policía, elementos del Estado Mayor y con altos mandos de la policía federal. Los vimos entrar y salir de las vallas, estaban resguardados por los propios policías y golpeando a nuestros compañeros”, denuncia Bautista, académico de la Universidad Iberoamericana y miembro del movimiento.

“Nosotros no reivindicamos la violencia pero existe un encabronamiento social. Reconocemos que hay mucha gente que esta enojadísima con las autoridades con la elección y reconocemos y sabemos que existen compañeros que cayeron en la provocación por estos grupos”, explica Javier Bautista.

“Hacemos un llamado a la sociedad para que los compañeros que están presos en el reclusorio estén representados por la sociedad civil, es decir en el #YoSoy 32 vamos asumir la libertad junto con la sociedad civil, pues consideramos que fue un ataque a la ciudad de México, que se suspendieron las garantías individuales. Fue un estado de excepción de al menos 24 horas, porque aún en la noche hubo enfrentamientos y detenciones, incluso en el Metro. Nosotros pensamos que esta represión abre la negociación o el pacto político que Macerlo Ebrad  ya habría realizado con  Peña Nieto”, concluye Bautista.

Siguen las detenciones contra el #YoSoy132

México D.F. Las detenciones contra integrantes del movimiento #YoSoy132 no terminaron el primero de diciembre. En la madrugada de este lunes “hubo cinco detenciones que ocurrieron a las cinco y media de la mañana. El hecho sucedió en avenida Parque Vía, a la altura del Metro Aquiles Serdán”, relató a Desinformémonos Liz Lugo, abogada que lleva el caso de los jóvenes Xóchitl Mitzi Hernández Álvarez, Gabriel Hernández Alvarado, Marco Antonio Uriostegui Martínez, Diego Fernando Correa, y el menor de edad Alejandro Ortega.

La abogada comentó que “los jóvenes se encontraban en un puente peatonal colocando un muñeco de trapo con la imagen de Enrique Peña Nieto y con una cartulina que llevaba una consigna anti-Peña, cuando fueron detenidos por una patrulla y son acusados de delito de ‘ataques a la paz pública’”.

Liz señaló que Alejandro Ortega es menor de edad y se encuentra en la agencia 57 del Ministerio Público, los otros cuatro están en la agencia 3 de Azcapotzalco, “y su único delito tiene que ver con el muñeco de trapo que fabricaron. La policía está haciendo diligencias para hacer su expediente más fuerte respecto a la averiguación previa que les abrieron”, indicó Lugo.

La abogada relata que de manera extraoficial, las autoridades les dijeron a los jóvenes que vincularán su imagen a otras marchas y en caso de que exista su participación serán -posiblemente- señalados con más imputaciones.

Respecto a la integridad de los jóvenes, Liz agregó que no fueron maltratados, ni amenazados, pero están privados de su libertad bajo un delito grave. Respecto a la situación jurídica, añadió que “hay posibilidad de que sean liberados, sin embargo, lo que nosotros estamos proponiendo -toda vez que no existe delito-, ya que el tipo penal que les imputan es inexistente, es que se cierre la averiguación previa en estos momentos”.

El plazo para una resolución en el caso de los jóvenes detenidos es de 48 horas. “Fueron puestos a disposición a las siete de la mañana de este lunes, y seguimos esperando la determinación del MP para el miércoles a las siete de la mañana”, finalizó Liz Lugo.

Fuente:Desinformemonos