Podemos caer en el error, las personas que nos encuadramos en la
ideología libertaria, al pretender explicar el capitalismo, fomentar
entre las personas que nos oyen su perdurabilidad y supuesta
inevitabilidad como mal social menor. Esto ocurre cuando hablamos de la
crisis, o de otros fenómenos económicos, meramente capitalistas, que en
otros tipos de economía no se darían, pues todos sabemos que en la
organización económica autogestionaria, las crisis de sobreproducción
(no es otra cosa lo que estamos viviendo ahora) quedarían limitadas,
cuando no abolidas por el transcurrir propio de la organización
económica anarquista.
Es por ello, que pretendo, desde mi humilde posición de militante, y antiguo estudioso de la economía, carrera que dejé, por cierto, asqueado por la manipulación que los profesores y directores de las diversas cátedras hacen de su contenido, presentando al capitalismo como algo inevitable y perdurable por siempre (por ejemplo, la asignatura historia económica empieza en el período capitalista, como si antes de éste no hubieran existido otras formas de organización de la economía, a saber: primitivismo naturalista y anarquista, esclavismo, feudalismo, capitalismo y capitalismo de estado); ni que decir tiene que se trata de una estrategia dirigida por el poder, para que la sociedad acepte el capitalismo como un hecho infundado, inevitable, casi como la forma natural de organización de la economía, cuando no es más que el producto de un tiempo y espacio determinados, es decir, una construcción histórica del hombre.
Por ello debemos hacer hincapié, los anarquistas, en difundir nuestra manera de organizar la economía, es decir: el comunismo libertario debe salir de los “museos” para adentrarse en la psicología y vida de la gente, pues es el único sistema económico que puede acabar con el capitalismo, además de ser el único no tamizado por la prueba del error, pues nunca se ha puesto en práctica a escala global, o cuando menos, en una extensión de terreno grande, excepto en Cataluña y Aragón durante la Guerra Civil Española.
En efecto, 3 son las características que el capitalismo tiene, para los estudiosos y charlatanes económicos de hoy en día, que debemos combatir sin denuedo:
a) Perdurabilidad en el tiempo: para la mayoría de investigadores económicos, el capitalismo es el sistema que va a regir el desarrollo de la economía humana durante todo lo que resta de historia, al haberse constatado la derrota del “socialismo real”, que no es más que un capitalismo de estado, pues seguía habiendo explotación del hombre por el hombre, y una asfixiante política de control y represión.
b) Sus categorías económicas son neutras moralmente: siendo el actuar humano lo que convierte al capitalismo en algo salvaje y depravado, a los ojos de la mayoría; pues bien, debemos hacer hincapié en nuestras tertulias con amigos, en que el capitalismo en sí, basado en la explotación del hombre por el hombre, es un sistema corrupto y de exterminio de la raza humana, al igual que lo fueron el esclavismo y el feudalismo.
c) El desarrollo del capitalismo ha hecho que la lógica de la lucha de clases se extinga: creando una mayoría social de “clase media”, en el limbo de la interpretación sociológica e histórica, que se rige por el modo de vida burgués, aún siendo explotados como obreros; con la práctica diaria y nuestra propaganda, debemos activar la consciencia de clase de la población en general, que viven en un mundo falso de prosperidad y “regaliz”, engañados por los medios de comunicación, la escuela, la universidad y los gobiernos de turno.
Por el contrario, 3 son las características básicas que una sociedad y economía libertarias deben tener, debiendo estar nuestra práctica cotidiana como individuos y colectivos supeditadas a la realización futura de dicho ideal de progreso y solución de los males del mundo, en el que todos creemos:
a) Adaptación sucesiva a los inconvenientes y problemas generados: es decir, nuestro sistema económico no puede convertirse en algo anquilosado y visto con ternura por los militantes anarquistas, sino que, partiendo de la base de que toda construcción humana es mejorable, debemos estar ojo avizor, para completar sus preceptos y prácticas al albur de las necesidades que vayan surgiendo en el trayecto histórico y de lucha por su implantación.
b) No jerarquización de las decisiones relativas a la economía: al ser esta la parcela que más le interesa a la población en general, debemos ser muy didácticos, y desmarcarnos lo más que lo permitan las circunstancias, de otras izquierdas, dirigistas y con presunción de liderazgo: trotskistas, maoístas, comunistas en general…
c) Implementación de un plan que nos lleve a nuestra meta, la consecución del comunismo libertario: para ello habrá que pasar por diversas fases, teniendo en cuenta que habrá zonas del mundo, o de un país en concreto, que estén más preparadas para llegar al ideal que otras, a las que habrá que ayudar con esfuerzo solidario, para conseguir el fin último propuesto, la implantación del comunismo libertario a escala mundial.
Dejo para sucesivos artículos las consideraciones que me parece necesario expresar con respecto a la transición entre el capitalismo y el comunismo libertario, teniendo siempre en cuenta que nuestros principios, y nadie nos puede decir que la práctica diaria vaya en contra de ellos, demuestran que para conseguir nuestra meta, los medios y los fines deben ser todo uno, es decir, debe haber una perfecta conjunción entre fines a conseguir y medios a emplear.
Nos parece de recibo, llegados a este punto, citar el nombre de un economista que puede ilustrar mejor lo dicho hasta ahora: no es otro que el gran Abrahám Guillén, autor de diversos libros en los que desenmascara el capitalismo como sistema económico repugnante, así como también otra serie de libros en los que dibuja el porvenir del comunismo libertario, explicado con palabras claras y concisas, que puede ser dirigido a todo tipo de públicos. Ánimo a todos los amantes de la Idea, en su ardua labor de rescatar del pasado y de los museos de la historia el comunismo libertario, para presentarlo como alternativa válida y capaz de lograr la hegemonía social, contra el capitalismo asesino que nos oprime.
@JuanSinamo http://elcaminodelaanarquia.wordpress.com/2013/12/12/la-economia-capitalista-como-constructo-social/
Es por ello, que pretendo, desde mi humilde posición de militante, y antiguo estudioso de la economía, carrera que dejé, por cierto, asqueado por la manipulación que los profesores y directores de las diversas cátedras hacen de su contenido, presentando al capitalismo como algo inevitable y perdurable por siempre (por ejemplo, la asignatura historia económica empieza en el período capitalista, como si antes de éste no hubieran existido otras formas de organización de la economía, a saber: primitivismo naturalista y anarquista, esclavismo, feudalismo, capitalismo y capitalismo de estado); ni que decir tiene que se trata de una estrategia dirigida por el poder, para que la sociedad acepte el capitalismo como un hecho infundado, inevitable, casi como la forma natural de organización de la economía, cuando no es más que el producto de un tiempo y espacio determinados, es decir, una construcción histórica del hombre.
Por ello debemos hacer hincapié, los anarquistas, en difundir nuestra manera de organizar la economía, es decir: el comunismo libertario debe salir de los “museos” para adentrarse en la psicología y vida de la gente, pues es el único sistema económico que puede acabar con el capitalismo, además de ser el único no tamizado por la prueba del error, pues nunca se ha puesto en práctica a escala global, o cuando menos, en una extensión de terreno grande, excepto en Cataluña y Aragón durante la Guerra Civil Española.
En efecto, 3 son las características que el capitalismo tiene, para los estudiosos y charlatanes económicos de hoy en día, que debemos combatir sin denuedo:
a) Perdurabilidad en el tiempo: para la mayoría de investigadores económicos, el capitalismo es el sistema que va a regir el desarrollo de la economía humana durante todo lo que resta de historia, al haberse constatado la derrota del “socialismo real”, que no es más que un capitalismo de estado, pues seguía habiendo explotación del hombre por el hombre, y una asfixiante política de control y represión.
b) Sus categorías económicas son neutras moralmente: siendo el actuar humano lo que convierte al capitalismo en algo salvaje y depravado, a los ojos de la mayoría; pues bien, debemos hacer hincapié en nuestras tertulias con amigos, en que el capitalismo en sí, basado en la explotación del hombre por el hombre, es un sistema corrupto y de exterminio de la raza humana, al igual que lo fueron el esclavismo y el feudalismo.
c) El desarrollo del capitalismo ha hecho que la lógica de la lucha de clases se extinga: creando una mayoría social de “clase media”, en el limbo de la interpretación sociológica e histórica, que se rige por el modo de vida burgués, aún siendo explotados como obreros; con la práctica diaria y nuestra propaganda, debemos activar la consciencia de clase de la población en general, que viven en un mundo falso de prosperidad y “regaliz”, engañados por los medios de comunicación, la escuela, la universidad y los gobiernos de turno.
Por el contrario, 3 son las características básicas que una sociedad y economía libertarias deben tener, debiendo estar nuestra práctica cotidiana como individuos y colectivos supeditadas a la realización futura de dicho ideal de progreso y solución de los males del mundo, en el que todos creemos:
a) Adaptación sucesiva a los inconvenientes y problemas generados: es decir, nuestro sistema económico no puede convertirse en algo anquilosado y visto con ternura por los militantes anarquistas, sino que, partiendo de la base de que toda construcción humana es mejorable, debemos estar ojo avizor, para completar sus preceptos y prácticas al albur de las necesidades que vayan surgiendo en el trayecto histórico y de lucha por su implantación.
b) No jerarquización de las decisiones relativas a la economía: al ser esta la parcela que más le interesa a la población en general, debemos ser muy didácticos, y desmarcarnos lo más que lo permitan las circunstancias, de otras izquierdas, dirigistas y con presunción de liderazgo: trotskistas, maoístas, comunistas en general…
c) Implementación de un plan que nos lleve a nuestra meta, la consecución del comunismo libertario: para ello habrá que pasar por diversas fases, teniendo en cuenta que habrá zonas del mundo, o de un país en concreto, que estén más preparadas para llegar al ideal que otras, a las que habrá que ayudar con esfuerzo solidario, para conseguir el fin último propuesto, la implantación del comunismo libertario a escala mundial.
Dejo para sucesivos artículos las consideraciones que me parece necesario expresar con respecto a la transición entre el capitalismo y el comunismo libertario, teniendo siempre en cuenta que nuestros principios, y nadie nos puede decir que la práctica diaria vaya en contra de ellos, demuestran que para conseguir nuestra meta, los medios y los fines deben ser todo uno, es decir, debe haber una perfecta conjunción entre fines a conseguir y medios a emplear.
Nos parece de recibo, llegados a este punto, citar el nombre de un economista que puede ilustrar mejor lo dicho hasta ahora: no es otro que el gran Abrahám Guillén, autor de diversos libros en los que desenmascara el capitalismo como sistema económico repugnante, así como también otra serie de libros en los que dibuja el porvenir del comunismo libertario, explicado con palabras claras y concisas, que puede ser dirigido a todo tipo de públicos. Ánimo a todos los amantes de la Idea, en su ardua labor de rescatar del pasado y de los museos de la historia el comunismo libertario, para presentarlo como alternativa válida y capaz de lograr la hegemonía social, contra el capitalismo asesino que nos oprime.
@JuanSinamo http://elcaminodelaanarquia.wordpress.com/2013/12/12/la-economia-capitalista-como-constructo-social/
Si que hubo un país donde el comunismo libertario se instauró como forma de gobierno durante algún tiempo: Ucrania
ResponderEliminarhttp://es.wikipedia.org/wiki/Anarquismo_en_Ucrania
Pero tenía demasiados enemigos en contra como para resistir durante mucho tiempo.
Salud!
Si, el anarquismo es el gran enemigo, no solo de la oligarquía y la plutocracia, sino también de la ignorancia y el egoismo. Es por eso que encuentra enemigos por todos lados, desde los burgueses hasta el lumpen y clases soñadoras del sueño capitalista.
EliminarSoy de la idea de que el mundo anarquista solo puede ser construido por anarquistas (con conciencia anarquista), tal vez con algunos aliados que pacten no explotar ni abusar (o intentarlo jejeje). Los ricos y acomodados lucharán a muerte por conservar sus cositas, los enajenados y esclavos agradecidos lucharán por conservar sus cositititas. Los anarquistas debemos de unirnos y luchar por construir nuestra sociedad anarquista, respetuosa de los demás pero decidida a defender nuestra forma de vida. Camino dificil nos espera, pero el único camino posible para la gente que no aspiramos a vivir a costa del sufrimiento y humillación de los demás.
Un abrazo amigo Piedra.